POOH Y EL PLANETA DE HEIDI

 Pooh y el planeta de Heidi

Hace muchos años cuando la tierra no tenía a los hombre como residentes se encontraban miles de criaturas mágicas y misteriosas, duendes, unicornios, sirenas, hadas y todo lo que pudieras imaginar, pero luego llegaron los mortales, y todas estas criaturas fueron desapareciendo, unas eran raptadas, otras estudiadas y muy pocas podían huir para ser libres. Las hadas eran las criaturas más importantes para los humanos, debido a que podían concederle 4 deseos a cualquier persona, así que los hombres las capturaban y vendían a los hombres más ricos quienes las regalaban a sus hijas o esposas para concederles deseos.

Poco a poco las hadas que eran capturadas terminaban muriendo de tristeza y de las otras no se sabía nada, porque a pesar de ser "libres" vivían escondidas de los humanos, Winnie era una de esas hadas obsequiadas y pasadas de rico en rico, como entretenimiento, ella conocía de pies a cabeza como era una niña rica y malcriada, de hecho se podría decir que adivinaba sus deseos sin que se los dijeran aun, "dame un carro, dame viajes, dame ropa, dame dame dame" era lo único que sabían decir aquellas niñas.

Pero un día finalmente Winnie logro escapar de esas personas, salió por una ventana y voló tan rápido como nunca lo había hecho, no tenía rumbo ni destino pero estaba segura de que nunca volvería a ese lugar ni a esas personas, se alejó tanto de aquellos edificios enormes que ya no veía ni uno, ahora solo podía ver árboles y casas muy pequeñas a comparación de las casas de ricos, por lo cual pensó que esas casas talvez serian de duendes o enanos, extrañamente se sentía como en casa, a pesar de que no veía ni una hada, mientras iba volando escucho los llantos y sollozos de lo que parecía ser una niña, Winnie no tenía pensado parar, ya mucho daño le habían hecho todas esas niñas con grandes lujos que lloraban por tantas bobadas. 

Pero cuando vio a esta niña fue diferente Winnie nunca había visto una niña así, aquella pequeña no vestía fino ni colorido, no tenía tacón en sus zapatos y mucho menos brillaban, por el contrario se veían bastante desgastados y sucios tanto su ropa como sus zapatos le quedaban algo pequeños, además no tenia ni un solo anillo o collar reluciente con diamantes. Winnie se preguntaba que hacia en ese lugar de casas tan pequeñas pero poco a poco se fue dando cuenta que ahí vivía, realmente se interesó en que le pasaba a aquella niña y porque no era como las otras que había conocido, así que decidió acercarse lentamente  hasta que aquella pequeña pudiera verle para así preguntarle su nombre y porque lloraba, la pequeña al verla no se asustó ni un poco, por el contrario sus ojos se secaron y brillaron como nunca y una sonrisa en su cara se asomó, estaba realmente sorprendida de ver un hada porque eso solo lo había visto en cuentos de fantasía, después de salir un poco de su sorpresa la niña le respondió "me llamo Heidi y estaba llorando porque no tengo amigos y todos me rechazan" Winnie se encariño de Heidi al instante y le ofreció sus 4 deseos, pero Heidi lo único que hacía era hablar con aquella hada, poco a poco se fueron conociendo la una a la otra se podría decir que eran amigas.

Pasó el tiempo y Winnie se empezó a preguntar porque aquella niña que le hacía falta tanto no había pedido ni su primer deseo así que le pregunto, la respuesta de Heidi cambio todo por siempre ya que le dijo "yo lo único que quería era tener una amiga y la conseguí desde el momento en que llegaste, pero si tengo un deseo y será el único que pediré"; Winnie quedó atónita por su respuesta y dispuesta a concederle su único deseo, después de unos segundos Heidi finalmente pidió su deseo: " deseo por favor, que todas la hadas y criaturas fantásticas vuelvan a tener un mundo tranquilo y que nunca nadie las vuelva a capturar y si es posible llevarme con todos ellos para nunca más estar sola lo agradecería", en ese momento Winnie con lagrimas en los ojos empezó a maquinar el deseo de aquella niña y poco a poco una burbuja gigante fue elevando a Heidi y a todas aquellas criaturas escondidas y atemorizadas por los humanos, se elevaron tanto y tanto hasta llegar a un nuevo planeta, este era igual a la tierra cuando no estaban los humanos, decidieron llamarlo el planeta Heidi donde ninguna criatura volvería a tener miedo ni estaría sola. así finalmente Winnie y Heidi cumplieron sus sueños de ser felices por siempre.